Los múltiples ítemes a pagar en marzo hacen que sea necesario buscar fórmulas para tratar de disminuir los gastos. Un experto detalla en qué fijarse para salir vivo de uno de los meses más temibles del año.
Llegó marzo. Comienza el año laboral y académico, y con ello se acumula una pila de gastos. La revisión técnica, las contribuciones, el permiso de circulación, la compra de útiles y uniformes escolares, el seguro obligatorio, el pago de las vacaciones, de cuotas atrasadas y un sinfín de otros elementos hacen que marzo sea uno de los meses más difíciles para el bolsillo.
Para aliviar el gran gasto que implica el tercer mes del año, es importante comparar precios y estar atentos a cualquier variación. Y es que tal como año a año lo informa el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), un producto escolar puede costar más del doble dependiendo de dónde se compre. De hecho, en el último estudio de precios de uniformes y útiles escolares, el Sernac detectó diferencias de hasta un 240% en el precio de algunas prendas escolares.
Para enfrentar de mejor manera estos ineludibles gastos, un experto entrega simples pero importantes consejos a seguir.
“Es clave informarse respecto de los precios, pues existen diferencias sustantivas, tal como lo indican los estudios del Sernac. Busque aquellos lugares más económicos como los outlet y trate de comprar al contado para obtener estos precios bajos. Si va a usar la tarjeta de crédito, privilegie las tres cuotas precio contado”, indica el académico de Ingeniería Comercial, Marcelo Escobedo Klein.
Otra recomendación es tratar de reducir la compra de útiles y/o uniformes lo más que se pueda. La regla de reutilizar libros o prendas del hermano mayor puede evitar importantes gastos adicionales. “Adquiera sólo lo necesario. Por ejemplo, si la chaqueta del año pasado todavía está en buen estado, no compre otra, aunque esto a veces es difícil pues los niños van creciendo. Respecto a los útiles escolares, prefiera textos usados que tienen un precio bastante menor al de uno nuevo. Muchos colegios organizan ferias, lo que le servirá para el bolsillo y para inculcar valores en sus hijos como la austeridad, el ahorro y el saber compartir”, comenta el ingeniero comercial.
Uno de los ítemes más difíciles de manejar son los gastos fijos, como el pago de contribuciones y el permiso de circulación. “En esto no es mucho lo que se puede ahorrar, porque generalmente son costos fijos, salvo en casos en que esté la posibilidad de pagar la mitad de la cuota en marzo y la otra en agosto”, señala el experto.
En marzo también suelen aparecer las cuotas atrasadas o las primeras de las vacaciones. El académico de la Universidad del Pacífico recuerda que es necesario tenerlas presentes y contabilizarlas en el gasto del mes. “Por lo mismo, tampoco es bueno pagar en más de 12 cuotas, porque la última cuota de este año se sumará a la primera de marzo del año siguiente”, precisa Emilio Sironvalle
Si las deudas ya son un hecho, refinanciar todo en un solo crédito puede ser una buena opción. “Es importante que se comparen ingresos con gastos, de tal manera de poder refinanciar a una tasa adecuada esos desfases en función del excedente líquido mensual”, concluye Marcelo Escobedo Klein , académico de Ingeniería Comercial.
En resumen:
- Compare precios antes de comprar.
- Prefiera lugares más económicos como los outlet.
- En lo posible, pague siempre al contado.
- Si paga con tarjeta de crédito, privilegie las tres cuotas precio contado.
- Recicle libros y prendas.
- Pague el permiso de circulación en dos cuotas.
- Nunca pague en más de 12 cuotas, porque agregará un problema más al año siguiente.
- Refinancie todas sus deudas en un solo crédito, de modo de ordenar los pagos y disminuir los intereses.