Al mediodía de este martes, AC Inversions, una supuesta empresa de inversiones que ofrecía a sus clientes una rentabilidad garantizada del 5% mensual (algo así como 80% anual), informó a sus clientes que no seguirá operando. Esto, pese a que un día antes sus ejecutivos aseguraban a El Mercurio Inversiones ser la firma con más experiencia en retornos garantizados en Chile, “con cinco años en el mercado”.
La compañía había sido contactada el día lunes por este medio para conocer de mejor manera la estrategia de inversión que le permitía ofrecer una alta rentabilidad y garantizarla, en momentos en que inversionistas del mundo entero están buscando activos de alto desempeño. Su fundador y gerente general, Patricio Santos Hernández, dijo a El Mercurio Inversiones que estaba dispuesto a conversar “la próxima semana”, sin mencionar los problemas que luego reconoció la firma. “Mis abogados los contactarán esta semana para coordinar”, indicó. Este martes, sin embargo, Santos estaba inubicable, pese a que envió un comunicado a sus clientes confirmando el cierre de la compañía. Éstos ya se están organizando para presentar una demanda contra ella.
El problema es que AC Inversions (cuyo nombre se escribe tal cual, con la palabra inversiones mal traducida al inglés), podría no ser el único caso. «Ésta podría ser la punta del iceberg de una serie de empresas que otorgan altos retornos, de forma fija y garantizada y que a mi juicio lo que ofrecen en realidad es un timo, un esquema piramidal”, dice Rafael Garay, economista de Think & Co.
A fines de febrero, esta empresa prometía una rentabilidad del 5% mensual, por un año. Así, por $45 millones invertidos, ellos entregaban mensualmente $2.250.000 y $35.800.000 anual, de acuerdo a una de las ejecutivas comerciales que atendía en su oficina en Providencia.
Se trata de una promesa similar a la que realizan otras compañías de servicios financieros detectadas por El Mercurio Inversiones, las que no están supervisadas por la Superintendencia de Valores, pero que ofrecen altos retornos garantizados a sus clientes a través de supuestas operaciones apalancadas en moneda extranjera.
No obstante, algunos de sus clientes ya habían inferido una estructura piramidal que podría estarse desarmando. “En marzo del año pasado comenzaron los atrasos en AC Inversions”, dice Francisco Luna, jefe de proyectos de una empresa de telecomunicaciones y ex cliente de esta compañía. “Yo me salí en enero de este año. Me puse en el caso de que esto fuera una estafa, y mi razonamiento fue ‘puede que lo sea, pero están partiendo’. En estos esquemas siempre pierden quienes entran al final. Desde el comienzo sospeché que había algo raro”.
Una página web busca organizar y defender a los clientes (a través del sitio www.acinversionsretrasopagos.cl). «Tenemos más de 5.500 clientes», dijo la ejecutiva telefónica antes de que cerrara la empresa.
Durante este martes por la tarde, cerca de 200 clientes de AC Inversiones se reunían en las afueras de su oficina en Providencia para reclamar por el dinero invertido y organizar algún tipo de acción colectiva que le permita recuperarlo. Algunos de ellos consultados por El Mercurio Inversiones decían que habían invertido más de $ 50 millones. «Somos cerca de 5.500 clientes en AC Inversions. No todos perdieron porque muchos salieron antes de que la pirámide se desarmara», dice uno que pide no revelar su nombre, pero que lidera la aglomeración. «Los montos perdidos, sin embargo, suman varios millones de dólares».
La Policía de Investigaciones informó que van más de 200 denuncias por estafa contra AC Inversions, investigada por los fiscales Carlos Gajardo y Pablo Norambuena de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Oriente.
Los mismos clientes dicen que la mayoría de ellos llegaron a AC Inversions por el boca a boca. «Un compañero de universidad estuvo durante años ganando con esta empresa muy altas rentabilidades», dice una ingeniera civil industrial, quien también pide no dar a conocer su nombre. «Siempre sospeché que había algo raro, pero era tanta la plata que ganaba que decidí entrar en octubre pasado… Perdí $ 35 millones».
El boca a boca de AC Inversions fue especialmente exitoso en tres grupos de inversionistas: empleados mineros, miembros de las fuerzas armadas y empleados de la línea aérea Latam (antes conocida como LAN). Muchos de los clientes reunidos frente a la sede de la firma estaban vinculados a ese tipo de organizaciones.
OTROS CASOS DE RENTAS GARANTIZADAS
AC Inversions no es (o era) la única empresa que ofrece este tipo de tentadoras alternativas de inversión garantizadas.
La firma IM Forex, por ejemplo, garantiza un retorno del 6% mensual si el cliente les transfiere $10 millones o más, con una permanencia mínima de un año. Y no parece irles mal. Al llamar a sus oficinas, sus ejecutivas preguntan inmediatamente si quien está del otro lado del teléfono es parte de las Fuerzas Armadas, sugiriendo el interés que tendrían algunos de sus miembros por operar con ellos.
Pero hay ofertas más atractivas aún. Investing Capital, con su sede principal en La Serena, pone a disposición dos planes a cambio de un monto de inversión mínimo de $5 millones: “Renta Fija mensual 10% o Rentabilidad Variable”. En este último caso, se trata de un producto “para quienes puedan tolerar rentabilidades no exactas”, y que en 2015 –según la firma—, alcanzó un retorno promedio mensual de 14%.
Saque la cuenta: esos $5 millones, al 10% mensual, se convertirían en casi $15.700.000 en un año. Si usted invierte $45 millones, en tanto, en doce meses tendría $141,2 millones. Un 14% mensual, a su vez, convertiría ese dinero en nada menos que $216,8 millones.
Suena tentador. De ahí que muchos hayan optado por cerrar los ojos para ganar dinero rápido, olvidándose de algunos importantes detalles. Entre ellos, el no saber cómo se mueven esos dineros: varias de las empresas sólo reconocen que operan el mercado de divisas, bajo un alto apalancamiento, pero no entregan más información. Otras omisiones de los clientes son más coloquiales: la palabra “Inversions”, como se señaló, no existe en el idioma al que se alude, el inglés.
“Yo veo en el folleto (de Investing Capital) cuestiones tan absurdas como una falta de ortografía básica. Hablar de transar o de transacciones con ‘z’ revela que además esto se está haciendo bastante mal”, dice Alejandro Ferreiro, ex superintendente de Valores y Seguros (SVS).
El ex regulador, quien analizó el contrato que entrega esta última firma a sus clientes, dice que este tipo de empresas, «no necesariamente» tendrían que ser reguladas por la SVS. “No todas las estafas asociadas u operaciones temerarias asociadas a los mercados de capitales son parte de las obligaciones de la SVS. En la medida en que esto pueda oler a un artificio, a una estructura para estafar a las personas, podríamos estar derechamente en el campo penal”.
Al ser consultadas si eran reguladas por dicha superintendencia, varias de estas firmas reconocieron que ello no ocurre, argumentando que los contratos por diferencia con los que ellos transan en los mercados de divisas, commodities y derivados, están fuera de la fiscalización del regulador local.
AC Inversions, Investing Capital e IM Forex son representantes de un cuestionable mercado en auge: el de las altas rentabilidades garantizadas.
“He estado estudiando estas empresas. Son de temer por los activos que hay atrás”, dice Pedro Pablo Larraín, gerente general de Sartor Investments. “Aquellas que ofrecen altas rentabilidades, por ejemplo 2% mensual por tres meses y al cuarto mes te devuelven el capital, son en su mayoría empresas piramidales. Esto significa que los nuevos inversionistas pagan los intereses de los antiguos inversionistas”.
De hecho, las rentabilidades que prometen estas compañías están por sobre las que consiguen los hedge funds, los sofisticados fondos de cobertura que cobran altísimas comisiones por la gestión de patrimonio. En 2015, el gestor de hedge fund que tuvo el mejor desempeño entre todos ellos fue Joseph Edelman, manager de Perceptive Life Sciences, con un retorno anual de 51,8%. En tanto, la rentabilidad promedio del top 10 de fondos mundiales por sobre US$1.000 millones llegó el año pasado al 28,6% anual.
En otras palabras: si usted hubiese invertido sus ahorros con el mejor hedge fund del mundo (algo muy difícil de lograr, dados los montos mínimos solicitados), los $45 millones señalados se hubiesen convertido en $68,3 millones, prácticamente lo mismo que ofrecía AC Inversions con su 5% mensual, y muy por debajo de los $216,8 millones que ofrece, por su parte, Investing Capital con su 14% mensual sugerido.
ATRACTIVO, PERO INVEROSÍMIL
“¿En qué invertiste en enero, si el mercado se desplomó un 8%, 9%, pero conseguiste ganar un 14% fijo por encima del mercado?”, dice Garay. “Me suena como algo muy atractivo pero totalmente inverosímil. Acá tú garantizas rentabilidades altas superiores a los esquemas con riesgo, pero fijas. Le estás diciendo a la persona, ‘yo gano más que la gente que toma riesgos pero no tomo ningún riesgo y le garantizo rentabilidad’. Eso no existe. En mi opinión, son simplemente esquemas que buscan captaciones muy fuertes, crecientes, que te permitan tener liquidez para pagar la rentabilidad, hasta que empiezan a producirse signos de fatiga, que dependiendo de los fondos se produce entre tres y cinco años. Algunos han durado más, como Bernie Madoff, que al final fue una estafa de US$160.000 millones”.
El economista señala que algunas de las mayores empresas que ofrecen altas rentabilidades garantizadas en Chile (según sus transacciones de fines del mes pasado) son AC Inversions, IM Forex y Future Global Vision. Dice que junto a ellas, muchas otras firmas pequeñas funcionan bajo la misma lógica.
“Conocí a AC Inversions a través de mi hermano, hace un año aproximadamente. Cuando yo llegué, los bancos le daban a él una rentabilidad anual de 5%, y ellos le ofrecían un 10% mensual. Cuando yo entré, a fines de 2014, estaban ofreciendo en el mejor de los casos un 5% mensual, y algo así como 60% anual”, dice Francisco Luna.
“Un 60% o 70% al año a todo evento no resiste el más mínimo análisis de un alumno de Economía 1.0. Pero son esquemas que han proliferado en Chile y la evidencia afuera es que todos han caído, todos. No importa el país, el tamaño, el administrador”, asegura Garay.
Los primeros signos de fatiga de la pirámide son los retrasos. «Si te garantizo que pago el 30, y te pagué el 5. ¿Por qué lo hice? Porque necesité que entraran inversionistas para poder pagar los primeros contratos”, añade. “También se pagan en días distintos, por el mismo esquema. Quizás los retrasos inicialmente puedan ser transitorios, pero ya se fractura el modelo. Hay un momento en el cual se corta el flujo y cuando eso ocurre tú ya no encuentras a los dueños. Cuando cesa el pago es cuando ya no queda caja”.
Los clientes de AC Inversions dicen que los retrasos en el pago se empezaron a ser constantes a fines de 2015, aunque Patricio Santos les mandó un comunicado explicando que se pondrían al día antes del 6 de marzo.
“Finalmente, después de todos los reclamos que hice y todo el polvo que levanté, a mí me devolvieron el dinero, pero tengo amigos que aún están con problemas y esperando su devolución”, dijo hace algunos días otro ex cliente de AC Inversions. “Ellos tienen un servicio al cliente pésimo. No contestan correos. No contestan llamados. Cuando responden algo son muy poco profesionales. Y no entienden que están trabajando con el dinero de la gente”.
Una ejecutiva de AC Inversions indicó hace pocos días que el retraso de los pagos se debió a un tema puntual y a una reestructuración de tasas en diciembre. “Primero ésta fue del 10%, luego del 7,5% y del 5% y hubo mucha gente que se quiso salir, y eso sí que nos afectó. Sabíamos que se iba a retirar gente, pero nunca supimos que iban a ser $5.000 millones en un mes. Ahora estamos en periodo de reorganización, estamos normalizando todos los pagos y además pasaremos en abril a ser sociedad anónima, lo que nos dará más fluidez en los pagos”.
Este martes, sin embargo, indicaron en un comunicado a sus clientes que «actualmente la empresa se encuentra sin capital para continuar operando en el mercado de divisas y menos aún para continuar pagando utilidades, ya que éstas no se han generado».
“En la historia de la economía moderna las figuras de inversión piramidal se basan en relaciones exactamente idénticas a las que estamos viendo”, explica Max Spiess, de Baraona Abogados, quien estudió particularmente las promesas y el contrato de AC Inversions e Investing Capital con sus clientes, la firma que ofrece hasta un 14% de rentabilidad (en base a sus “resultados” del año pasado).
“La estructuración de pirámides que finalmente conllevan a un fraude normalmente están basadas en relaciones de confianza que no son tal, donde en realidad se trata de una persona que está abducida, enamorada de una teórica reputación y experiencia, así como de los resultados que habría mostrado la empresa en el pasado”, añade Spiess.